jueves, 6 de noviembre de 2008

Congo

Al ver el artículo que publica hoy El País sobre el conflicto del Congo, hasta parece que tenga un carácter de protesta. Habla de la indiferencia mediática, de los recursos minerales como origen de las disputas y al final nos hace una serie de preguntas sobre el origen de los comates y sobre el papel que juegan los organismos internacionales. En la última frase, el autor se lamenta diciendo que "demasiadas preguntas que, como siempre, quedarán sin respuesta". No obstante, yo pienso que o no ha querido dar las repuestas o no se ha interesado en buscarlas ni un minuto, ya que se sabe perfectamente quien ha lanzado gasolina a las llamas de esta región.
La República Democrática del Congo es uno de los países con más riquezas naturales del mundo. El cobre, el cobalto, el oro, el tantalio, los diamantes y el coltan se encuentran en abundancia en el subsuelo del país. Las multinacionales europeas y norteamericanas han estado extrayendo minerales y dejando para el país solo entre un 5 y un 12% del valor de los minerales. Pero la realidad es que se están produciendo masivas extracciones ilegales que se escapan a través de Ruanda con la complicidad de su presidente, Paul Kagame.
Laurent Kabila, presidente de la RDC, ha querido acabar con el expolio para que los beneficios de la minería reviertan directamente en los congoleños. Por ello, ha firmado una serie de contratos con las empresas estatales chinas CREO y Sinohydro para la concesión de varias explotaciones y que repercutirían para la RDC un beneficio del 30%. Para evitar la corrupción que supondría la entrega del dinero en líquido, se ha previsto que este se reciba en forma de inversiones en el país: 3.000 km. de carreteras, 3.000 más de ferrocarriles, 31 hospitales, 145 centros de salud y 4 universidades. A diferencia de los contratos con multinacionales europeas y de los EEUU, estos acuerdos no prevén ninguna condicionalidad ni injerencia en el país.
Ante esto, las compañías que operan actualmente en la RDC, con el apoyo de las potencias occidentales, temen perder acceso a los recursos estratégicos y dejar de tener capacidad de influencia en la región. Y como la vida de las personas no tiene importancia al lado de un buen puñado de dinero, han financiado al gobierno de Ruanda para la compra de armas y la formación de grupos de soldados paramilitares mayoritariamente formados por ruandeses y comandados por un congoleño, Laurent Nkunda (para desvincular Ruanda de responsabilidades), con la finalidad de desestabilizar el gobierno congoleño y a toda la región. Un cambio de presidente podría significar el ruptura de los contratos con los chinos y el control total de las explotaciones.
Por otro lado, La misión de la ONU en la región, la MONUC, que debería ser la encargada de proteger a los civiles de las tropas de Nkundu, han sido acusadas de actuaciones irregulares abriendo el camino de los paramilitares. El jefe de la misión, el teniente general español Díaz de Villegas, dimitío hace diez días alegando motivos personales, pero afectado por unas comunicaciones interceptadas a unos soldados de la MONUC en las que pedían al ejército ruandés que enviara refuerzos para dar apoyo a los paramilitares de Nkundu, que se encontraban en inferioridad ante el ejército congoleño. También se ha demostrado que las fuerzas "de paz" han suministrado armas a los rebeldes. Es significativo que en las ciudades de Goma y Bukavu se hayan producido recientemente masivas manifestaciones pidiendo que salgan del país los cascos azules de la MONUC. Por algo será.
La Unión Europea tampoco aporta demasiado a la resolución del conflicto. El pasado 22 de octubre, en la comisión parlamentaria europea, el belga Dirk Vandermaelen reconoció que quizás estuviéramos delante un enfrentamiento de intereses comerciales entre los EEUU y China, pero pidió tan solo un embargo de armas para el ejército del gobierno legítimo de la RDC, no para las tropas invasoras de Nkundu.
Mala pinta tiene la situación si a las potencias occidentales solo les convienen dos cosas: la anexión de la región de Kivu Norte (la región minera) al gobierno dócil de Ruanda, o la sustitución de Kabila por un presidente títere. En ambos casos, el pueblo congoleño será la principal víctima.

10 comentarios:

Sarashina dijo...

Como siempre, miquelet, el pueblo X será la principal víctima, se trate de lo que se trate. Es ya un cansancio enorme lo que producen estos abusos continuos sobre África, donde las potencias mundiales y las multinacionales o las grandes empresas se aprovechan de las luchas intestinas y de los canallas internos. ¿Cuándo se podrá acabar con estas lacras mundiales? Sólo veo una ventaja sobre abusos pasados: que hay gente como tú para decirlo y libertad para que el que quiera se entere. No lo podemos ver aún, pero esto es algo importante para el futuro. Gracias por tu prístina explicación.

Mal bicho dijo...

Menos mal que ganó Obama. Si no Bush o McCain seguro que invadirían el Congo para trincar todas las riqu....estoooo para instaurar la democracia en el mundo y salvar a esas pobres gentes de la tiranía y las armas de destrucción masiva.

supersalvajuan dijo...

Zaireando, siempre zaireando. Y la ONU mirando para otro lado.

el Kontra dijo...

Buen post maestro felino. Como siempre cuando los intereses encontrados afectan las ganancias de las multinacionales, los políticos y las organizaciones internacionales se desentienden del asunto. Triste pero cierto. Saludos.

laz dijo...

http://es.youtube.com/watch?v=9WP7uj5AOZE

en 1976... sin mas.

Anónimo dijo...

Hace unos días vi una entrevista en la tele que le hacían a Vázquez Figueroa. Hablaba de los problemas de esa zona de Africa y del coltán mineral del que casi todos no teníamos ni idea de su existencia hace poco (no se encuentra en el subsuelo por cierto). Su último libro se titula así “Coltán” (no lo he leído) y narra la situación que tu describes. Hablaba de la esclavitud en la que se encuentran los niños (que son quienes escarban para encontrar el mineral de marras), de las mafias que trabajaban para un gobierno u otro dependiendo de la fuerza, de que eso transcendía al primer mundo como “lucha entre etnias” cuando todo es parte de intereses comerciales…. Lo más interesante es que quien lo contaba es testigo de los acontecimientos desde hace muchos años. No hablaba muy bien de los chinos, de lo que están haciendo en la zona quiero decir.
Los “productores” de oro reciben 0.06 dólares/onza en Zimbawe y los intermediarios lo ponen a 734d/o en el mercado internacional. Las grandes empresas trapichean mediante ejércitos de mercenarios para quitar a sus rivales comerciales la producción pagando mucho más a los productores que se ven entre la espada y la pared; después llevan ese oro a otro país africano , (Sudáfrica…) y lo revenden a un nuevo precio (más elevado) en el circuito “legal”. Los esclavos siguen siendo los mismos, por 0,06 o por 1, da igual trabajan por la comida (escasa).

Buen artículo Miquelet.
Saludos.

Anónimo dijo...

La organización es la base de los pueblos. Un país rico sin orden es un país pobre.

Saludos.

sirleito dijo...

QUE FEO Y COBARDE ES ABUSARSE DE LOS RECURSOS DE LOS DEMAS

PAISES DESARROLLADOS? POR FAVOR...

Fernando Manero dijo...

Muy buen análisis de la situación de la R.D. Congo, que simboliza claramente lo que pasa en Africa y el papel que se asigna a ese continente en el mundo. Continente atormentado, explotado, humillado... y enormemente codiciado. Hace tiempo que la ONU se ha cubierto de gruesa capa de mierda en su presencia en Africa y algún día habrá que poner en su sitio a los que desde esa organización han contribuido al desastre. Todavia no le hemos visto al sonriente Ban ki Moon darse una vuelta por ahí si es que ese tipo de sa una vuelta por algu sitio salvo restaurantes de lujo y cosas por el estilo. Interesante el libro de Vazquez Figueroa titulado "Coltán", pero si se quiere descubrir Africa no dejeis de leer EBANO de Ryszard Kapucinski. Magnífico e impresionante

miquelet dijo...

CLARES: Desde el pueblo llano es muy difícil hacer un boicot efectivo, ya que se trata de materias primas que se utilizan para casi todo. Todo depende de la ética de las empresas, de las organizaciones internacionales y de las presiones de los gobiernos responsables. podemos hacer presión con nuestra voz y nuestro voto.

MAL BICHO: Sí, como en Irak, donde ya han liberado a miles de personas (los han liberado de la pesada carga de estar vivos).

SUPERSALVAJUAN: Y cuando mira lo hace con miopía extrema.

EL KONTRA: Es la ley del máximo beneficio. En esa ley no está previsto incluir las vidas humanas.

LAZARO6PUNTO1: Muy, muy bueno. No conocía esa película. Como tú dices es 1976. Hoy todo eso se ha multiplicado.

NECRONOMICON: Es un expolio en toda regla. La única diferencia es que unos expolian más que otros y los que más expolian quieren echar a los que menos expolian para seguir expoliando igual. Un poco lioso pero en definitiva es eso.

NEUROTRANSMISORES: Y hay países a los que no se les deja organizarse. Un país desorganizado es como un supermercado sin cajas. Te llevas la compra y dejas una limosna o nada.

SIRLEITO: Unos países y unas empresas que carecen de toda ética nunca pueden llamarse desarrollados.

FERNANDO MANERO: El mercado lo domina todo, incluso la ONU. Sería para ellos complicarse la vida poniéndose en su contra a las grandes corporaciones. Y total para meterse en un conflicto que ni siquiera es mediático. Así que seguirán en sus restaurantes.
Te recomiendo una genial película llamada "La pesadilla de Darwin". Conviene verla en versión original subtitulada. Tan estremecedora como real.

Muchas gracias por vuestros comentarios.